04 de junio de 2025 – Dirección de Postgrado y Postítulos Facimed
Respirar mejor es vivir mejor:
una subespecialidad que transforma infancias
La Universidad de Santiago de Chile lidera la formación de subespecialistas en Medicina Respiratoria Infantil, una subespecialidad que aborda de forma integral las enfermedades más frecuentes y urgentes de la niñez chilena, con un enfoque humano, clínico y social.
Las enfermedades respiratorias siguen siendo la principal causa de consulta y hospitalización en menores de cinco años en Chile. Frente a esta realidad, la USACH impulsa un programa formativo pionero en Medicina Respiratoria Infantil, que busca preparar a profesionales capaces de cambiar el rumbo de la salud pública pediátrica, con vocación, tecnología y una mirada territorial.
La salud respiratoria infantil en el centro: el compromiso formativo de la USACH con las nuevas generaciones de especialistas
La salud respiratoria infantil enfrenta hoy múltiples desafíos en Chile, desde patologías como el asma, la bronquiolitis o las infecciones respiratorias bajas recurrentes, hasta factores ambientales y sociales que agravan el panorama. En este contexto, la subespecialidad de Medicina Respiratoria Infantil se presenta como una herramienta decisiva para fortalecer la atención integral de niños y niñas.
Así lo plantea la Dra. Viviana Aguirre Camposano, académica de la Facultad de Ciencias Médicas de la Universidad de Santiago de Chile (USACH), y parte del equipo formador de este programa que combina excelencia clínica, sentido social y compromiso con la red pública.
Enfermedades respiratorias: una urgencia pediátrica permanente
“Uno de los grandes desafíos en salud infantil sigue siendo el alto número de enfermedades respiratorias, tanto agudas como crónicas”, señala la Dra. Aguirre. Estas condiciones representan una de las principales causas de consulta médica, hospitalización e incluso mortalidad infantil en el país. A esta realidad se suman factores como la contaminación ambiental, el humo del tabaco y las condiciones de vida precarias.
Desde esta perspectiva, la Medicina Respiratoria Infantil no solo permite diagnósticos más certeros y tratamientos oportunos: “Permite diseñar estrategias de prevención tanto en hospitales como en la atención primaria. Además, fortalece el trabajo con las familias y los equipos de salud, lo que ayuda a prevenir complicaciones y reconsultas”.
Más especialistas para una mejor salud pública
La escasez de subespecialistas en esta área constituye uno de los déficits estructurales del sistema de salud, especialmente en regiones. “La necesidad ha crecido mucho, pero la formación no ha ido al mismo ritmo. Esto ha generado una importante brecha, sobre todo en regiones fuera de Santiago, donde muchas veces no hay acceso a un profesional con formación específica en respiratorio infantil”, advierte la académica.
La incorporación de nuevos profesionales no solo mejora la atención clínica, sino que también potencia la docencia, la investigación y la articulación de redes de salud infantil en todo el país.
El perfil de quienes transforman la salud infantil
El o la pediatra interesada en esta subespecialidad debe contar con vocación clínica, sensibilidad social y disposición para el trabajo interdisciplinario. “La empatía, la paciencia y la capacidad de trabajar con niños y niñas y educar a las familias son cualidades muy valoradas, ya que muchas veces el éxito del tratamiento depende del seguimiento y la adherencia en el hogar”, asegura la Dra. Aguirre.
Esta formación ofrece un enfoque integral, en el que también hay espacio para la docencia y la investigación en un campo en constante evolución.
Una formación de excelencia al servicio del país
El programa de Medicina Respiratoria Infantil de la USACH se caracteriza por su enfoque integral y práctico, “con un fuerte componente clínico y una estrecha vinculación con la red pública de salud, en especial con el Hospital El Pino. Esto permite que la formación se desarrolle en un entorno real, conectado con las necesidades actuales del país”, comenta la Dra. Aguirre.
También destaca el uso de tecnología de punta: “Contamos con un laboratorio de función pulmonar altamente equipado y un programa de fibrobroncoscopía con modelos de simulación para el entrenamiento práctico de los estudiantes”, añade la especialista.
El cuerpo docente está compuesto por profesionales con vasta trayectoria clínica e investigativa, lo que asegura una formación alineada con los desafíos actuales del sistema de salud chileno.
“Los profesionales que han egresado del programa de la USACH han demostrado una sólida preparación clínica y han logrado insertarse rápidamente en distintos centros de salud del país. Muchos ya están liderando equipos en hospitales, unidades respiratorias y programas de seguimiento de enfermedades crónicas”, concluye.
Prevención, seguimiento y calidad de vida
La Medicina Respiratoria Infantil tiene un impacto directo en la reducción de hospitalizaciones. “El diagnóstico precoz, los tratamientos personalizados y un buen seguimiento permiten que muchos niños puedan mantenerse estables en sus hogares, evitando internaciones innecesarias”, indica la Dra. Aguirre.
Además, subraya el valor del acompañamiento familiar: “Un niño o niña con asma bien controlada puede ir al colegio, jugar y disfrutar su infancia sin interrupciones. Ese es el objetivo principal: mejorar su calidad de vida”.
Un llamado a transformar vidas
La Dra. Aguirre finaliza con una invitación clara a médicas y médicos pediatras: “Les diría que se acerquen, que conozcan más sobre esta área apasionante. La Medicina Respiratoria Infantil permite enfrentar algunas de las patologías más comunes en la niñez, pero también abre la posibilidad de cambiar vidas, de verdad”.